martes, 24 de julio de 2012

La venganza del Prinosaurio

En el año de 1959 Augusto Monterroso escribió como parte de su libro “Obras completas y otros cuentos” un microrelato: Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí. Durante décadas, se consideró el relato más corto de la lengua española y el más célebre de todos los publicados por el autor nacido hondureño. En 2005 fue sustituido por el joven mexicano Luis Felipe Lomelí con su microrelato El Emigrante. Aún así, cualquier persona amante de la literatura mencionará primero a El dinosaurio. Si los dinosaurios nos causan morbo, admiración, temor y asombro… los PRInosaurios nos causan más. Cuando el prinosaurio despertó… ¿Quiénes estaban ahí? Estábamos todos, estamos todos. Todos los que estábamos, todos los que éramos y otros tantos que ya no quisieron ser. Dice Lorenzo Meyer: “Nunca estuvo enteramente dormido, andaba medio amodorrado…” Dijo Polo Espinosa: “Nunca estuvo muerto… si acaso andaba de parranda…” Acaban de cumplirse 12 años de que Fox sacara a patadas al Prinosaurio de Los Pinos, ahora el mismo Fox promueve su regreso argumentando que en su partido, de todos no se hace ni uno. Lo quieren expulsar por la osadía. El ya se había ido solito. El PRI regresa a los Pinos con un triunfo legal y contundente habiendo convencido a la mayoría de los ciudadanos. Es el regreso, la reconciliación, el reencuentro entre los mexicanos, manifiestan muchos. Es el regreso del paternalismo a su máxima expresión, es el regreso del partido que más ha gobernado de manera continua en toda América latina y regresa por lo suyo después de 12 años de oposición, es el regreso del partido creado por Plutarco Elías Calles, del partido que nacionalizó la industria petrolera, del partido que impulsara la reforma agraria. Es el regreso de un partido que logró que México mantuviera el poder sin golpes de Estado, pero que gobernó durante la matanza de Tlatelolco y la crisis de 1982. También del partido que gobernó durante el devastador terremoto de 1985 donde los operativos de Gobierno fueron insuficientes para salvar muchas víctimas. Es el partido de Salinas de Gortari, es el partido de Luis Donaldo Colosio, es el partido de todos, o casi todos. Porque todos fueron y fuimos PRI en algún momento, porque todos, hasta los más radicales de izquierda tuvieron padres priístas. Porque todos sabemos quién es, porque todos sabemos dónde está, porque todos sabemos con quien se junta, con quien juega, qué come y a quien se va comer… Porque el dinosaurio, es el dinosaurio, eso no está en discusión.