miércoles, 18 de abril de 2012

¿De quién es el petróleo?


¿De Quién es el Petróleo?

En 1938, un 18 de marzo, el Presidente General Lázaro Cárdenas se paró en el palco central del Palacio Nacional de la Ciudad de México y anunció su decisión de estatizar –dicen nacionalizar pero eso es falso- los bienes de la industria petrolífera del país. La medida no mereció solamente el aplauso generalizado de las clases políticas. Para resarcir a las compañías inglesas y norteamericanas gravemente afectadas hubo de hacerse una colecta pública de fuerte impacto; las señoras iban y entregaban sus argollas matrimoniales y más de un niño rompió su cochinito. El petróleo comenzó a ser nuestro.

La Presidente de Argentina, la señora Fernández acaba de anunciar su decisión de estatizar los bienes de YPF –eso es Yacimientos Petrolíferos Fiscales, el equivalente a PEMEX- que era propiedad de Repsol, una compañía española. El Presidente de México Felipe Calderón se mostró molesto y consideró que “su amiga” debiera repensar la medida. ¿Cuál es el cambio de los tiempos? En judicatura universal, lo que se encuentra bajo la tierra de un país –sea oro, plata, plomo, platino, agua o chapopote- es patrimonio de ese país. Lo que ese país hace con ese patrimonio es privilegio de sus gobernantes.

A los mexicanos los gobernantes nos han vendido que somos una potencia petrolera. No es cierto. La mayor cantidad de petróleo, y de mejor calidad, consumido en el mundo viene de Dubai, Irán, Rusia y Venezuela. El crudo mexicano es de escasa calidad y alto contenido de azufre. ¿Cuál es la diferencia? Que Dubai, Irán, Rusia y Venezuela tienen contratos con empresas trasnacionales, la Shell holandesa, la Exxon americana, la Texaco de obvios orígenes para que se encarguen de la explotación, procesamiento y comercialización del combustible. Nuestro muy digno nacionalismo impide que los pinches gringos le quiten los privilegios. El petróleo argentino, ubicado mayormente en la Patagonia, será explotado y procesado por la BP, empresa de Gran Bretaña con la que Argentina disputa la soberanía de las islas Malvinas.

Desde el lunes que se dio a conocer el anuncio no sólo los diarios internacionales han dado espacio a la noticia. En Twitter un usuario subió una imagen trabajada en la que se aprecia a Mariano Rajoy secuestrando a Lionel Messi acompañada del mensaje: "Cristina Kirchner, tenemos a Messi. No intervenga YPF".

El texto que acompaña la imagen dice: "DESPROPORCIONADA medida del gobierno español tras la expropiación de #YPF".

Esta una muestra de las expresiones que se están generando entre ambos países, y a la que se suman opiniones a favor y en contra de personas de diferentes nacionalidades.

Hoy se se publicó también información sobre una encuesta que revela que ocho de cada diez ciudadanos españoles (82,6 por ciento) rechazan la decisión de la presidenta argentina, Cristina Fernández y la consideran una medida grave que puede perjudicar las relaciones entre ambas naciones.

¿De quién es pues, el petróleo?

jueves, 5 de abril de 2012

EL CONEJO DE PASCUA




El conejo de Pascua es un personaje que aparece como un conejo que trae los huevos de Pascua, que a veces se representa con ropa. En la leyenda, la criatura trae canastas llenas de huevos de colores y dulces a los hogares de los niños, y por ello tiene similitudes con Papá Noel, ya que ambos traen regalos a los niños en la noche antes de su día de fiesta correspondiente. Se mencionó por primera vez en la obra de Georg Franck von Frankenau "De ovis paschalibus". (Acerca de los huevos de Pascua), que se refiere a una tradición de Alsacia de una liebre que trae los huevos de Pascua.

Aunque sus orígenes no están muy definidos, se supone que la elección del conejo se debe a su conocida capacidad de procreación, de gran valor simbólico en unas fiestas dedicadas a la fertilidad de la tierra tras el invierno.
Su uso se remonta a pueblos antiguos del norte europeo que veían en la liebre un símbolo: las fuertes patas traseras de la liebre le permiten moverse siempre hacia arriba con facilidad, mientras que sus débiles patas delanteras le dificultan el descenso.

Desde antes de Cristo, el conejo era un símbolo de la fertilidad asociado con la diosa fenicia Astarté, a quien además estaba dedicado el mes de abril. En alusión a esa diosa, en algunos países a la festividad de pascua se la denomina "Easter".

El diccionario Westminster de la Biblia recoge que Easter era “originalmente la festividad de la primavera para honrar a la diosa teutónica de la luz y de la primavera, a quien se conocía en anglosajón como Easter“. Ya en el siglo VIII los anglosajones habían transferido dicho nombre a la fiesta cristiana que designa la celebración de la Resurrección de Cristo, adaptando el nombre de la fiesta pagana en las tradiciones cristianas.

A partir del siglo XIX, se empezaron a fabricar los muñecos de chocolate y azúcar en Alemania.

LEYENDA.

En la tradición se transmite el relato sobre el origen del conejo de Pascua, el que cuenta que en el tiempo de Jesús un conejo estuvo encerrado en el sepulcro junto a Jesús y presenció su resurrección. Al haber presenciado el milagro, al salir de la cueva junto con Jesús, se dice que fue elegido como el mensajero que comunique y recuerde a todos los niños la buena nueva, regalando huevos pintados, y actualmente también regalando huevitos de chocolate y otras golosinas durante la Pascua, de forma similar a como ocurre con Papá Noel en Navidad.

(La imagen es una postal antigua que lo representa)